Dicen que Pelé debutó con un pibe, al menos eso es lo que se dice en la historia del fútbol. En este caso, nada tiene que ver con el balonpie, pero el apodo y el pibe seguramente resulten conocidos. Sobre todo en Coronel Vidal. Padre e hijo, le hicieron creer a la sociedad que el primogénito había sido diagnosticado con cáncer de estómago, por lo que comenzaron a solicitar dinero en “campañas solidarias”, haciendo caer a cientos de personas realmente solidarias que colaboraron desinteresadamente. TODO ERA MENTIRA, SE LES DESTAPÓ LA OLLA.
Omar, en adelante “el padre”, y Agustín, en adelante “el hijo”, son los protagonistas de una historia indignante para la sociedad.
Hace algún tiempo, creo que más de un año, no recuerdo bien, soy me memoria floja, comencé a ver en las redes sociales una campaña de recolección de dinero, que tenía que ver con un chico de Coronel Vidal, que supuestamente había enfermado de cáncer. Al saber de quienes se trataba, inmediatamente me hizo ruido la situación, por lo que, democráticamente, con mi único voto, decidí no publicar la campaña. “Hazte la fama y échate a dormir” fue el refrán que se me vino a la cabeza en principio, aunque gente de mi entorno decía “¿vos crees que son capaces de mentir con algo tan grave?”. SI, fue mi respuesta. El padre, comenzó a solicitar guita a todos sus contactos, para los presuntos tratamientos del hijo. Muchos, que querían colaborar, pero que no tenían con qué, comenzaron a viralizar los pedidos. Creo que tengo varios mensajes en el Facebook de 02265.
Incluso, hasta una foto del pibe en silla de ruedas fue parte de este teatro. Algunos medios publicaron el pedido de ayuda. Entre medio, una “polémica” que tuvo eco en medios nacionales, cuando el “pobre” del chico, mandó a arreglar su IPHONE a un lugar de CABA, y, (cito títulos de otros medios), “No se lo quisieron arreglar porque tenía una foto con CFK”, aunque esto, es un chascarrillo dentro de la historia. Pero no lo quería dejar pasar.
Lo cierto es que, el padre, realizó hasta videos pidiendo plata. Diciendo que, para poder mantener al hijo necesitaban por mes, alrededor de 230 mil pesos “para gastos de quimio, alquiler, expensas y comida” del ahora ex convaleciente.
La olla, en este caso, la destapó un colega fotógrafo, quien se dedica, además de tomar imágenes, a realizar diversas campañas solidarias para gente que necesita. Sin dudarlo, al conocer la “historia”, creyó como muchísimos e inició “Todos por Agustín”, solicitando a otros fotógrafos y personas particulares la ayuda económica que se requería para el enfermo.
El padre, enviada asiduamente documentos de “facturas” de lo que se gastaba en procedimientos médicos, con la intención de recaudar esas sumas de guita, pero, algunas cosas comenzaron a hacer ruido y, con esa alarma, se inició una investigación que incluyó hasta a abogados, que participaron de esto. El resultado, INDIGNANTE, todo, absolutamente todo, era una mentira. NUNCA ESTUVO ENFERMO, y vivió, o vivieron, casi un año, a costa de gente, que ponía lo poco que tenía para “ayudar” a estos psicópatas.
EL CURANDERO:
Creo que esto merece un capitulo aparte. El hijo, después de haberse conocido LA ESTAFA, y antes de borrarse prácticamente por completo de todas las redes sociales, hizo un video, en el que reconoció que no está enfermo, pero, ni lerdo ni perezoso, contó una historieta, en la que se incluye “una persona que ve”.
Un supuesto curandero habría sido el que le dijo al hijo que estaba enfermo de cáncer de estómago. Y acá, se abren más interrogantes. ¿De dónde salían las facturas de las supuestas quimioterapias y tratamientos médicos? Según el propio padre, era el mismo curandero el que las hacía, por lo que, conociendo un poquito nomas, acá se constituyen algunos delitos muy graves. ABUSO DE CONFIANZA, ESTAFA y FALSIFICACION DE DOCUMENTOS.
El resto ya es historia… Ah, pasó Nico y dijo “que negro estafador, no lo puedo creer”… Lugar de mis amores, Pueblo Chiquito…
