POR WALTER CHASMANN // “De alguna manera” creo que ha sido la frase conectora más utilizada por Carlos Ronda en cada nota, entrevista, o discurso improvisado que le ha tocado decir. Los discursos escritos siempre han sido bastante correctos en la dicción. Pero ese no es el caso de la nota, solo un dato de color. Se termina el mandato de Cambiemos/UCR en Mar Chiquita, quienes lograron el poder después de 12 años de espera, y que a mi modo de ver, no supieron aprovecharlo para lograr otros 4 al frente del distrito.
Todo era color de rosa, o amarillo, al comienzo de la gestión, y hablo de comienzo, contando solo el primer mes de gobierno. Los primeros chispazos hicieron desertar al por entonces delegado de General Piran Abel Nuesch, quien sostuvo que “fueron 40 días de infierno” los que tuvo como parte del gobierno. A este se le sumaron al menos una renuncia por mes, cambiando alrededor de 15 figuras dentro del organigrama. Cultura, RR HH, delegación Costa Norte, Secretaría General, entre otras figuras fueron abandonando el barco de las filas rondistas.
Se termina un gobierno con más “debe que haber” en varios sentidos. Obras, por ejemplo, fue uno de los puntos más dejados de lado en cuanto a lo visible; pero que en lo invisible ha tenido sus logros, como parte de las cloacas de Santa Clara del Mar o el barrio África de Coronel Vidal. Aunque más de 100 viviendas que fueron comenzadas en la gestión anterior y que no se terminaron durante los 4 años de gobierno de Ronda fueron punto de inflexión para los electores, que por más que había promesas no se dejaron llevar por ellas.
Una administración bastante desordenada, que provocó cientos de enojos en los proveedores, pagos a destiempo, y una deuda que queda en responsabilidad del gobierno entrante es algo de lo que dejan estos cuatro años, aunque a decir verdad, creo que siempre ha habido un dedo marcador de “a este págale, y a este déjalo un poco más”. Vuelvo a insistir, a mi modo de ver.
No pongo en duda la bondad de Carlos Ronda, a cada uno de los que me ha pedido opinión siempre dije, “Carlitos es un muy buen tipo, lo que no significa que sea una gran gobernante”, esto, para aclarar, no es mérito solo de Ronda, sino también del entorno que lo acompañó. No todos eran santos de la devoción popular, y mucho menos los pormenores que en los pueblos todos iban sabiendo.
No puedo decir que este que termina fue un buen gobierno, aunque tampoco puedo decir que todo es culpa de Ronda. La provincia y la Nación arrastraron con una gran crisis a los municipios y se trasladaron los problemas hacia los más vulnerables. Los que eran de clase baja pasaron a la indigencia prácticamente, y la clase media a la pobreza. Esto no lo digo yo solamente, sino las estadísticas oficiales.
Me quedo con la gente buena que pasó por este gobierno, que son bastantes e intentaron hacer cosas, aunque siempre con trabas, y no los voy a nombrar por razones obvias. Los malos, ya saben ellos mismo quiénes son, y tampoco merecen ser nombrados, porque ellos son los que pusieron trabas a quienes realmente querían gobernar para la gente.
Hasta mañana soy parte de este gobierno! Como bien dice Carlos es buena persona… Sin medios trabaje hasta hoy tratando de poner obras privadas en orden… Sin ordenanzas, sin combustible… Jamás me tembló el pulso. Mi gestión duró sólo 10 meses… Y también la he padecido.
Que de oportunidades perdidas!! tantas promesas de políticas de estado que resultaron mentiras!! y bueno..la basura aún sin juntar..una pena todo este tiempo desaprovechado