El proyecto de ordenanza fue ingresado por el concejal Miguel Guglielmotti del Frente de Todos y es una iniciativa conjunta del del Sindicato de Empleados de Comercio y la Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP).
“Este tipo de iniciativas alientan a pensar en el otro, a levantar barreras, evitar prejuzgar y visibilizar la realidad de sectores minoritarios de nuestra sociedad”, explicó el legislador Miguel Guglielmotti.
El objetivo es que los diferentes comercios fijen una hora y día donde deberán reducir los ruidos en los locales y se bajar la intensidad de las luces. De esta manera, se genera un ambiente «amigable» para quienes padeden TEA.
Iniciativas similares ya se aplican en las localidades de Rawson y Esquel (Chubut); Villa Carlos Paz (Córdoba); Caleta Oliva (Santa Cruz); Santa Rosa (La Pampa); Paraná (Entre Ríos), entre otras.